CIUDAD DE LAS ARTES Y LAS CIENCIAS
Posted on 15:36 by anonimo
La Ciudad de las Artes y las Ciencias (en valenciano: Ciutat de les Arts i les Ciències) es un complejo arquitectónico, cultural y de entretenimiento de la ciudad de Valencia (España).
El complejo, diseñado por Santiago Calatrava y Félix Candela, fue inaugurado el 16 de abril de 1998 con la apertura de El Hemisférico. El último gran componente de la Ciudad de las Artes y las Ciencias, el Palacio de las Artes Reina Sofia, fue presentado en sociedad el 9 de octubre de 2005, día de la Comunidad Valenciana, aunque su programación regular como teatro de la ópera de Valencia no comenzó hasta el otoño de 2006.
La Ciudad de las Artes y las Ciencias está situada al final del viejo cauce del río Turia, cauce que se convirtió en jardín en los años 1980, tras el desvío del río por la gran riada de Valencia en el año 1957. Constituye, hoy en día, el mayor reclamo turístico de la ciudad de Valencia.
CONTENIDO
Los edificios que lo integran son, por orden de inauguración:
L'Hemisfèric: con forma de ojo. Sala de proyecciones de cine IMAX, planetario y Láser. Dispone de una superficie aproximada de 13.000 m².
El Museo de las Ciencias Príncipe Felipe: con forma parecida al esqueleto de un dinosaurio, es un museo interactivo de ciencia. Ocupa alrededor de 40.000 m² repartidos en tres pisos.
L'Umbracle: paseo ajardinado con especies vegetales autóctonas de la Comunidad Valenciana (jara, lentisca, romero, lavanda, madreselva, buganvilla, palmeras,...) cubierto por arcos flotantes desde donde se puede ver todo el complejo de la Ciudad de las Artes y las Ciencias. Alberga en su interior El Paseo de las Esculturas, una galería de arte al aire libre con esculturas de autores contemporáneos. (Miquel Navarro, Francesc Abad, Yoko Ono y otros..)
El Oceanográfico: es el acuario oceanográfico más grande de Europa con 110.000 metros cuadrados y 42 millones de litros de agua. Su cubierta en forma de nenúfar es obra del arquiteco Adrián Peláez Coronado nacido en Valencia.
Palacio de las Artes Reina Sofía: con cuatro grandes salas: una Sala Principal, Aula Magistral, Anfiteatro y Teatro de Cámara. Sala de Exposiciones. Está dedicado a la música y a las artes escénicas.
El Puente de l'Assut de l'Or que comunica la ronda sur con la calle Menorca, y cuyo pilono de 125 metros de altura es el punto más alto de la ciudad.
El Ágora: Una plaza cubierta, actualmente en construcción, en la que se celebrarán conciertos y eventos deportivos, como el nuevo gran premio de la Comunidad Valenciana de Tenis.
Las Torres Valencia, Castellón y Alicante: forman parte de un proyecto que consiste en la construcción de tres rascacielos de 308 m, 266 m y 220 m. Actualmente el proyecto está parado y hay pocas posibilidades de que se lleve adelante.
ORÍGENES DEL PROYECTO
En 1989, el entonces presidente de la Generalidad Valenciana, Joan Lerma, asumió la idea de José María López Piñero, catedrático de historia de la ciencia de la Universidad de Valencia, de construir un museo científico en los terrenos del Jardín del Turia que lindaban con el camino de las Moreras. Lerma encargó la creación de un equipo que articulara el proyecto y que visitó espacios de similares características en Múnich, Canadá o Londres para elaborar un proyecto de evidente cariz pedagógico: un átomo serviría de guía al visitante para mostrarle todas las facetas de la naturaleza.
El museo iba a ser el centro a partir del cual giraría un complejo, mitad cultural, mitad turístico, que iba a servir para "hacer de Valencia un lugar emblemático", según expresó el propio Lerma en la presentación de las obras, dos años después. La Ciudad de las Ciencias, que era el nombre que el gobierno autonómico daba a la iniciativa, constaba de una torre de comunicaciones de 370 metros de altura -la tercera más alta del mundo en aquellos momentos-, un planetario y el museo de carácter científico. El coste total de las obras se estimaba en unos 25.000 millones de pesetas, unos 150 millones de euros.
Aquel proyecto provocó, desde el principio, el recelo de la oposición. El PP vio en la Ciudad de las Ciencias, una "obra faraónica" que sólo serviría para hinchar el ego de los socialistas, impulsores de la iniciativa. La torre de comunicaciones fue el principal blanco de las críticas. No obstante, la obra siguió los cauces legales para su construcción.
0 comentarios:
Publicar un comentario